Manute Bol, el jugador más alto (2,31 m.) de la historia de la NBA, abandera ahora la reconciliación de su país tras haber perdido 250 familiares en la guerra civil de Sudán. El ex jugador de Bullets, Warriors, Sixers y Heat, ayuda ahora a la asociación 'Sudan Sonrise' y dedica ahora todos sus esfuerzos a ayudar a los más desfavorecidos.
El gigante está dedicado en cuerpo y alma a la reconstrucción de su país, abogando por la reconciliación antes que por la venganza. "Mi sueño es construir escuelas en el sur de Sudán, porque gracias a la educación tendrán una vía decente de encontrar un empleo y de mejorar su nivel de vida", asegura Bol.
Manute Bol subvencionó al comienzo del conflicto al ejército de liberación del pueblo de Sudán, liderado por miembros de su tribu, a los que financió con 3,5 millones de dólares. "Los jóvenes son el futuro de Sudán, poco importa de qué región o de donde vengan", asegura el ex pívot, volcado con la reunificación pacífica de su país, en busca de un futuro mejor para su pueblo.
Creo que esta persona esta sufriendo mucho. Ojala cambie todo.
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